Carta de Servando a un catequista

Bugove 10 Abril 96.

Amigo Antonio José:
Un saludo cariñoso para ti y tu familia, en especial Mª Dolores y Rocío. En medio de esta gente refugiada transcurre mi vida este año. Ciertamente es un cambio sustancial de ocupación. El estar con esta gente no creas que es un heroísmo ni mérito personal. Lo único que es, es una gracia y un regalo muy grande que Dios me ha dado. Ciertamente parece que el mundo entero se ha aliado para hacer la vida imposible a estos millones de refugiados. En mi campo hay 20.000. Es casi imposible imaginar mayor sufrimiento y angustia en la gente. En medio de todo esto estoy contento y con ganas de continuar. Veremos a ver por cuánto tiempo. Aquí cada día inventan medidas a cual más inhumana para que vuelvan a su país, Ruanda. Pero la gente no se mueve, prefieren morir aquí a entrar: tienen miedo de que les van a matar.
Un saludo de amigo y mucho ánimo.

Servando.